No era amor el que me diste,
era egoísmo, arrogancia,
dominio y posesión...

El amor es suave, comprensivo,
pura vida y no intención...

Vuelven los recuerdos,
me lo gritan en los tímpanos,
y en mi imaginación...

Veo tus palabras,
tus acciones y mí reaccionar...

No era amor el que me diste,
el mío si lo fue...

El día en que abrí los ojos,
se volcaron mis sueños en un Dios...

En ese aquel tan grande, en ese aquel tan simple,
como Jorge Luís Borges que escribió.
"EL OLVIDO ES LA ÚNICA VENGANZA Y EL UNICO PERDÓN"

Al irme de tus brazos,
me agarré del gran olvido,
ví mi núcleo y me alegré...

Me quite la venda absurda,
que llevaban invisibles, mis pupilas...

Yo te daba amor, tu me dabas vida y muerte al mismo tiempo!
Yo renacía!
Como Ave Fénix, mi corazón pisoteado,
resucitó.

Como lo hacen los fuertes...

Ahora dicen q lloras por las calles,
que sufres encerrado en tu mansión,
con un vaso de alcohol, tu gran amigo, tu prioridad.

Yo te amaba, te adoraba,
mira ahora como escribo...

Me quité el flechazo de Cupido,
salió dolor, recuerdos entumecidos de otros grandes amores...

Y que fueron?
Solo, poco, casi nada.

Sola siempre amo yo...

Creer en Jorge Luís no es poca cosa,
el que quiera me refute lo que piense,
mas olvidar yo nunca puedo,
y perdonar tampoco quiero...

Seguiré recordando a Borges,
pues su alma está a mi lado...

Rey eterno, inolvidable, Jorge Luís Borges.

Te encontraré en el olvido,
Te encontraré en el perdón.