(Todo salvaje antes del alba)
crepúsculo injerto en materia quebrada
esquinas extraviadas
niño biocida neurocida
cartones y periódicos
viejos
polillas viejas
huesos perforados
fríos sordos esquirlados
viejos.
duermo en este puente
sobre la luna
en ella
con el mármol irradiado de mis ojos vertiginosos
floto en los bajeles más profundos
otoños de hojas blancas lluvias de sal
cabellos deslizándose
entre las garras de la bestia
copos de nieve
que se confunden entre
mi sombra mutilada y mi asfixia sin órbita.

aquí bien todo tranquilo…

las luces finales a la salida del edén
el pasto furioso incendiándose en la retina.
ocaso caos acurrucado a pequeño eclipse aturdido
desplomado
acalambrado
ansiedades
ardor febril
incrustados en la cúpula de cieno
masticando la lengua
con el aliento careado.
media luna
media rota
media nada
reflejo cardos
hilos polvorientos de baba árida
desprendiéndose de todos los filones posibles
delirio suicida
inhalación sísmica
embriaguez dialéctica
gritar en medio del silencio hasta COMPRENDERla respuesta
reflejo incompleto
témpanos tomándose de improviso el cuello
aturdidos por la sensación de existencia
ahogándose en el sexo de la noche
en el verbo inefable del alquitrán.

la urea humedece los pies
que desfilan en este lado del cielo
agujas hirvientes lloviendo sobre los últimos abrazos
últimas palmadas en el hombro
últimos besos en la frente.
La miseria inmemorial transita en esta celda
las flores escupen su rocío
el cuervo relame su coraza desgarrada
espera silencioso sonriente
la muerte contempla sus gestos de dolor
y recoge los escombros de mi sombra
fosilizada transcorpórea
fracturada insomne y con hambre atrasado.