la soledad es mìa
los caminos se terminan en mì
todos los cantos no dicen nada
la palabra muere tras un beso
y no me veràs màs

los libros aguantan todo tipo de ideas
tu mirada atrapa mis sentimientos
no perdono tu sed de mì
acojo a la noche oscura
cuando matè a la luna
para que nadie nos viera
en el momento de huir

se contradice el corazòn
la carne quema en un rozar incansable
màs allà en los bares
alguien busca al amor
sin nada encontrar

las calles estàn oscuras
invadimos al mundo con ira
muere el intento de querer safarse de las pesadillas
la locura aprisiona los anhelos
hay angustia ahora en mi mirada
la libertad es dejada para los poemas
porque quiero concebir algo distinto
y no encuentro lo que busco

èste texto es inutil
no transmite lo que siento
y tù resistes a ser mìa
en medio de mis gritos
en medio de todo
un universo aparte nace a cada momento
los ojos que descubren a la vida
traen los mismos recuerdos de los que ya no estàn

y todo està enajenado
la luz del candil se apaga
justo cuando creo haber hallado el camino
la sonrisa de la noche no es mi còmplice
mi compinche eres tù
pero acaso sòlo es por un tramo
hay alguien lejano esperando para cada quien
se ha roto la magia y el hechizo
de lo que pudo ser eterno
no existe la plenitud perfecta
tras el descubrimiento de la agonìa
tras el entendimiento del final

y estamos en medio de todo
resistiendo a decirnos adios
estrellando nuestra sùplica a los que no se dejan ver
alguien debe de tener las respuestas
a tanto vacìo que ahora crece
y nos apartaremos
como cuando nos conocimos
abriremos una sanja que no querremos recordar nunca

còmo liberarnos de èsta encrucijada
còmo acceder de otra forma a la libertad
còmo hacer un poema sin ambos
en què libro no nos volveremos a encontrar
què espejo no nos reflejarà màs

y la vivencia se repite
no somos originales
nuestra historia no es distinta
y yo mato a la luna...