La noche descubre el rostro de los desterrados a las horas vacìas en donde la vida no existe.Liban los muertos sus recuerdos ante leyendas que dejaron de ser.La risa diabòlica del que se lleva los honores descanza junto a colosos ocultos donde moran los secretos que son otorgados a pocos,viejos brujos que se baten en duelo con la muerte sin encontrar jamàs la paz.Cigarro tras cigarro los pasos de los congregados que nada tienen ya que perder dibujan rutas sin sentido coherente enervados por el delirio de un sueño que ya no es suyo.Acaba de morir el prometido,el màs esperado,en medio de negras putas que lo reciben para redimirlo en medio de una libertad propia de condenados.Para què pues existir dice el guerrero que dolido en su honra ha sido sodomizado por los crueles señores que dominan el sistema y deshonran a los rebeldes.Diablo mundo donde tanto el hombre como la mujer han de pertenecer al macho cabrìo para aventurarse recièn a los placeres mundanos donde ya nada se siente.Desfila la droga entre tanto derrotado tratando de olvidar los años en que el cielo tenìa otro color y en el que las palabras de los clèrigos tenìan una razòn de ser:Dios se ha olvidado de nosotros! grita el niño que armado revienta el rostro de un policìa.Corre la sangre para los paganos que reniegan de los poderes de la luna y los rituales:No hay hombre ya digno para èste mundo:Jesùs era eunuco!.Tropeles de entes errantes acompañados por danzas azules y tristes enarbolan una bandera donde el falo reina desafiando la virilidad de todos los humillados.Locura de ciudad entre zombies que se resisten a aceptar los dìas difìciles donde se perpetua una inmortalidad propia de vampiros que nunca ha de acabar.Y hay tanta gente que ignora esto,personas que deambulan entre los condenados ignorando el precio de sus existencias en donde se dice aùn gozan del paraìso edènico hasta que lleguen a ser expulsados por probar de la carne,por probar del deseo.Las miradas de los zombies buscan otras vidas,buscan la redenciòn.Oscura la noche donde reina la Luna el ritual se incia una vez màs para desbocar mujeres lùbricas menstruantes deseosas de fornicar con cuanto hombre se cruce en su camino.Dominar y no dejarse dominar,sexo,sexo y posesiòn.Muere la inocensia en medio de una balada cantada por niños desprotegidos que observan al cielo buscando la respuesta a sus dolidos corazones:¡dònde mora Dios! es el grito,¡Dônde!,y nadie sabe responder mientras el olor fètido de los cuerpos es mezclado entre vino y sangre...no hay nadie vivo,al menos,para las creaturas de la noche.
EN MEMORIA DE LOS GUERREROS DE LA NOCHE QUE AÙN PERDURAN FIELES A SUS PRINCIPIOS.